Luisa. Metro setenta, 72 kilos. Madrid
El metro va lleno
Como siempre
"Las chicas bonitas no pagan dinero, me dijo el barquero" -canta bajito
Quiero ser bonita, pero sobre todo quiero que me lo digan y creérmelo. Para mi próximo cumple me lo pido.
No conozco ningún barquero, pero un par de tipos con los que salí me dijeron que tenían un yate
No quiero pagar aunque casi siempre lo hago
Cada noche lloro un poco
Unas lágrimas furtivas por un amor perdido.
Sergio, mi músico loco. No me da la gana de quitarle el posesivo "mi". Es mío su recuerdo. Su melena, su mirar vergonzoso, su intensidad, su inteligencia, su suavidad.. Le amo eternamente. Esto me tortura. Eternamente significa que moriré amando a alguien que se fue, pero no le espero como Penélope.
Odio mi imagen de paciente mujer envejeciendo en un banco de la estación.
Me llama dos veces al año.
En verano para decirme que alguna vez nos iremos de vacaciones juntos y en Navidad para desearme un Feliz Año. Es su manera de anunciarme que sigue respirando. Yo también respiro. Su ausencia.
Este año no le cogí el teléfono.
No comí en tres días, hasta que tragué ese viejo dolor que tan bien conozco.
Ojalá en alguna de esas llamadas me hubiera dicho si me amaba. La duda es lo peor.
Nadie debería dejarte diciéndote que eres demasiado buena y que encontrarás algo mejor.
No soy tan buena y no hay nadie mejor que tú. Y he conocido unos cuantos de varias especies.
Te sigo amando.
Quiero ser bonita y no quiero pagar
Sofía. Metro sesenta y cinco, 68 kilos. Bilbao
El metro va lleno.
Como siempre.
"La primera canción el cariño,
los besos y los versos
en las noches sin fin
las mañanas secretos y pasión" -canta bajito
Siempre hay una primera canción. Se me cosió la vida a la música y en mi cabeza suena mi banda sonora. Ninguna fue un gran éxito
Quiero que me besen en verso. Ser poesía. Ser música y flotar. Encima de este vagón atestado de gente, sobre esta ciudad. Sobre mi misma.
Quiero noches eternas donde nunca amanezca, La oscuridad absoluta saliendo de mi alma.
Quiero mañanas donde tus ojos me miren y no mirarme en ojos desconocidos o en los ojos vacíos de mi espejo.
Ahí no me conozco ni me encuentro.
Unas lágrimas furtivas por un amor perdido.
Ahí no me conozco ni me encuentro.
Cada noche lloro un poco
Salva, el fotógrafo. Nunca fuiste mío. Teníamos fecha de caducidad. Creía que el amor era para siempre. Bendita inocencia la mía, que me hizo amarte tanto.
Ojos miel enormes que me siguen acechando. Están en las paredes blancas, no sé porqué sólo en las blancas. Tengo que pintar mi casa de muchos colores, quizás así consiga olvidar tu color.
Ojos miel enormes que me siguen acechando. Están en las paredes blancas, no sé porqué sólo en las blancas. Tengo que pintar mi casa de muchos colores, quizás así consiga olvidar tu color.
Nuestra primera canción... Me la cantaste tú. Recuerdo cual fue, pero no quiero...
No puedo aún decirla. Duele demasiado.
No puedo aún decirla. Duele demasiado.
Decías que yo era triste y no fuiste capaz de ver lo feliz que era a tu lado. Sólo mirándote se me llenaba el corazón de dicha. Cuando te recuerdo siempre sonrío.
Estarías contento ahora que si que soy una mujer feliz.
Poco piadosa con tu género, dura, guerrera. Me convertiste en una fiera sin fe. Lástima que no puedas ver tu obra. Hiciste un buen trabajo.
Poco piadosa con tu género, dura, guerrera. Me convertiste en una fiera sin fe. Lástima que no puedas ver tu obra. Hiciste un buen trabajo.
No te guardo rencor.
Por dentro sigo igual de tierna y la rabia no conduce a ningún sitio.
Por dentro sigo igual de tierna y la rabia no conduce a ningún sitio.
Mi locura no es contagiosa. Me vendría bien un poco de tu cordura.
Nadie debería dejarte por whats cuando te ha hecho el amor el día antes y rematándolo con un "te quiero. Todo irá bien".
¿Qué pasó? El desconcierto es lo peor. Te sigo amando.
Quiero noches eternas y besos con sabor a versos por las mañanas
Silvia. Metro setenta y dos. 83 kilos. Valencia.
Como siempre.
"Es por ti que soy un duende
cómplice del viento
que se escapa de madrugada
para colarse por tu ventana" -canta bajito
Quiero escapar pero nunca seré un duende. Prefiero ser un gigante. Una mujer montaña aunque me siento pequeña. Creo que perdí altura y ya no es que fuera muy alta.
Quiero colarme por una de las ventanas que esperaba que construyeras para mi.
Espere tanto como pude, pero no quisiste o no pudiste hacerme ninguna. Ni siquiera una tan pequeña como yo, una en la que cupiera mi alma de duende.
Unas lágrimas furtivas por un amor perdido.
Cada noche lloro un poco
Esteban, el cabal. Hace sólo unos días que me alejé de ti. Extraña partida la nuestra. Aparecí en tu vida por sorpresa y supongo que te asalté. Me declaré en la primera cita, ya estaba enamorada. No te asustaste, tú que lo analizas todo, y estuve perdida. Te quise más.
No hubo promesa, ilusiones ni desengaños.
Así son las cosas, aunque odiabas la frase, es la que mejor define lo que sucedió sólo en mi cabeza. Algún beso inmensamente tierno y dulce, algún café y muchas conversaciones donde filosofamos sin cesar.
Me encanta tu mente, tu sonrisa, como te muerdes el labio, como te subes el cuello de la camisa, el tacto tan fino de la piel de tus manos.
Así son las cosas, aunque odiabas la frase, es la que mejor define lo que sucedió sólo en mi cabeza. Algún beso inmensamente tierno y dulce, algún café y muchas conversaciones donde filosofamos sin cesar.
Me encanta tu mente, tu sonrisa, como te muerdes el labio, como te subes el cuello de la camisa, el tacto tan fino de la piel de tus manos.
Yo me llené de adjetivos, tú conjugaste y analizaste mi amor.
Ahora ya da igual
No hay hueco para mi
Hay que aceptar lo que no puede ser.
Ahora ya da igual
No hay hueco para mi
Hay que aceptar lo que no puede ser.
Claro que te extraño. Lo primero que me enseñaste es que para amarte tendría que extrañarte pues no estabas.
Nadie debería no dejarte diciéndote que ya vivió un gran amor anterior a ti.
¿Llegué tarde? La incertidumbre es lo peor.
Te amo.
Te amo.
Quiero grandes ventanales y puertas abiertas. Que quepa todo el amor que siento y pase como el viento.
No quiero conformarme con persianas bajadas aunque queden rendijas abiertas.
No dejaré de soñar. Hasta soñaré que algún día seas tú quien me busque
Yo ya no puedo
Me quedé sin fuerzas
No dejaré de soñar. Hasta soñaré que algún día seas tú quien me busque
Yo ya no puedo
Me quedé sin fuerzas
Amparo. Metro sesenta. 53 Kilos. Barcelona
El metro va lleno.
Como siempre.
Como siempre.
"¿Porqué soy yo la de la mala suerte?
Corre corazón
No mires atrás
¿Con quien se queda el perro?" -canto bajito. Frases sueltas. Inconexas.
No tengo tanta mala suerte.
Tengo salud, mi hijo, familia y unos pocos buenos amigos y a todos los AMO.
El corazón me corre sólo con un suspiro. Es un don.
Atrás no queda nada.
Y no tengo perro. Siempre quise uno.
Siempre quise muchas cosas...
Unas lágrimas furtivas por un amor perdido.
Corre corazón
No mires atrás
¿Con quien se queda el perro?" -canto bajito. Frases sueltas. Inconexas.
No tengo tanta mala suerte.
Tengo salud, mi hijo, familia y unos pocos buenos amigos y a todos los AMO.
El corazón me corre sólo con un suspiro. Es un don.
Atrás no queda nada.
Y no tengo perro. Siempre quise uno.
Siempre quise muchas cosas...
Cada noche lloro un poco
!Que bien te ves!
¿Qué a quien amo o amé?
¿Qué a quien amo o amé?
Jaja
¿De verdad creías que te lo iba a contar?
Me encantan los melocotones pero no los como porqué no soporto tocarles la piel.
La espera es lo peor
¿O no?
Me encantan los melocotones pero no los como porqué no soporto tocarles la piel.
La espera es lo peor
¿O no?
;)
¿El amor es eterno?
¿Se puede amar varias veces en una vida?
Conozco las respuestas
Si me lo pides te las susurraré al óído
Conozco las respuestas
Si me lo pides te las susurraré al óído